Llegas al Súper para comprar tu harina para el bizcocho, y te encuentras la estantería correspondiente con telarañas. No problem, hoy comparto una receta bizcochera donde la harína ni se ve ni se la espera…
Ingredientes:
- 12 galletas Maria
- 200 grs de avellanas (puedes sustituir todo o parte por nueces
- 6 huevos
- Una cucharadita de vainilla
- Un sobre de levadura (ojo, de la química, no de la panadera, pero vamos ésta no la vas a encontrar…)
- 200 grs de azúcar
- 50 grs de orujo o ron
- 40 grs de aceite de oliva
- sal
Modo de hacerlo:
- Pones en el robot (yo siempre uso mi Lidlmix) las galletas y las avellanas. Lo trituras todo a máxima velocidad durante 15 segundos. Abres, bajas la mezcla de las paredes del vaso y vuelves a triturar otros 15 segundos.
- Incorporar los huevos, como siempre sin cáscara.
- Bates 20 segundos a velocidad 3.
- Añades el sobre de levadura, la cucharadita de vainilla líquida, una pizca buena de sal y el azúcar. Mezclas 20 segundos a velocidad 3.
- Pones el aceite y el aguardiente o ron. Bates 20 segundos a velocidad 4
- Coges un molde desmontable, a ser posible de unos 24cm de diámetro y 5 cm de altura. Lo untas bien de mantequilla.
- Pones a calentar el horno arriba y abajo a 200°.
- Metes el molde en la nevera durante 10 minutos. Es bueno que la masa esté fría para que suba más.
- Metes el molde en el horno a una altura media. Bajas la temperatura a 180° y lo mantienes durante 50 minutos aprox.
- Pasado este tiempo, lo sacas y lo dejas enfriar antes de desmoldarlo.
Este bizcocho suele durar de media en una familia española de 4 personas, decente y temerosa de Dios, no más de un día.